Quien sabe cuántos años han pasado
Cuantas veces los fresnos se vistieron de colores
Las veces que la Luna se hundió en el mar
No lo sé…sólo sé que siempre te amé
Hubiéron primaveras rotas
Tristes inviernos bañados en llanto
Tórridos y envejecidos veranos
Y nunca dejé de soñar contigo.
Algunas veces estuve extraviado
En las sombras del olvido
Enterrado en las brumas de mi ebriedad
Pero nunca dejé de pronunciar tu nombre.
Muchos almanaques se deshojaron
Hoja a hoja el viento se los fue llevando
Tu nombre iba siempre repitiendo
No sé si a tus oídos alguna vez llegaron.
Hoy te vi por las calles caminando
Llevas en la cabeza hilos de plata
Tu mirada parecía perdida en el silencio
Tus ojos ni siquiera voltearon hacia mí
Al verte venir a mi encuentro
Quise llamarte alborozado
Y aunque te parezca raro
Se me olvidó tu nombre.
Lima 10 de agosto del 2018