El cielo deja caer sus perlas
sobre este día obscuro, frío
y lleno de nubarrones.
No se escuchan los pájaros trinar
el viento, la brisa , escondidos en los chopos,
no los quieren abrazar...
el único alegre, haciendo fiesta
es el Miño, porque su amado poeta
por siempre lo acompañara.