Tu cuerpo en ruinas
sobre
el mio inacabado,
incompleto.
Estamos a medio construir.
Y a medio destruir.
Y voy a empezar a descosernos
de a poco
las heridas,
e intentar curarlas de otra manera.
O aprender a vivir con un hueco.
O aprender a conocerlas desde otro lugar.
Deberíamos atribuirle un sentir diferente a las palabras,
inventarnos un amor
para así después
no podernos olvidar,
o recordarnos de otra manera.
O dejarnos de recordar,
y olvidarnos de otra manera.
Vamos a hacer el amor hasta querernos.
Saboreando universos.
Y heridas.
Y tu boca, y la mia.
Y guardar a los orgasmos en un puño.
Y a tus ganas de romperme en el otro.
Y cagarnos en el desamor.
-Nacemos junto con el aire que dejamos escapar antes de decir te quiero.
Y morimos cuando sólo lo decimos por rutina.
Y resusitamos con el aire que no escapa cuando dejamos de hacerlo. Con valentía.-
Quisiera que la palabra tempestad
sólo te haga pensar, en ti y en mi riendo.
Y lluvia, en ese día cuando nos mojamos por placer, y que placer el mio.
Y la palabra Mentira, sólo signifique recuerdos contando nuestras verdades.
Y nada nunca será más verdad que tú.
Que donde hubo incendio, recuerdos quedan.
Y el próximo beso, lo das tú.
Y ahora eres algo así, como un antónimo de la palabra felicidad.
Es como si supiera donde esta la herida y no hiciera nada por curarla, y sólo esperara a ver una cicatriz a medio cerrar. Más tarde.
Y espero entender,
lo que me cuesta,
o lo que te quiero,
o lo tan limón que eres.
Somos flores, en un mundo en ruinas.