COMO EL SALITRE DE UN MAR REVUELTO
Eres mi pena
y mi amargura,
mi desventura
que me hace impura...
eres todo
lo que he anhelado,
eres un sueño
que no he alcanzado.
Ando siempre sola
y perdida,
en un laberinto
sin salida,
buscando el rumbo
y sin guía,
desde el instante
de tu partida.
Lloran mis ojos,
ruedan lamentos,
como el salitre
de un mar revuelto,
lágrimas salobres
de sufrimiento
que mi alma vierte
a todo momento.
¡Ay! si tan solo
pudiera tenerte,
aunque sólo
fuera un momento,
de mi vida
se iría el tormento
que me amenaza
con la muerte.
Yo te diría
que sin ti me hundo,
que eres mi vida,
eres mi mundo,
sin tu presencia
no hallo consuelo.
¡Amarte siempre
ése es mi anhelo!
Pero es un sueño
que ya no existe,
desde el momento
que tú partiste,
quedó mi alma sola
y tan triste
y me pregunto
¿por qué te fuiste?
Al interrogante
no hallo respuesta,
sé que es el destino
me encadena,
a un suplicio
de amarga pena.
¡Vivir sin ti
es mi condena!
Felina