Carretillas Humanas se vislumbran en los campos
sin ayuno para la carga
varadas se encuentran en el limbo
Cohabitando las tres temporalidades.
Hay un convento de alaridos empotrado en las miradas
suturar a las heridas nunca fue fácil
pero tampoco es imposible.
Si hay propuesta
la tormenta mar adentro será efímera
mortal
y en cada aurora germinará algun antídoto.
Lacerarse por lo acontecido siempre será ineccesario
darle vuelta a la página
es un homenaje a la existencia
es sincronía con el cosmos.
La lluvia a veces arrecia
otras veces no
y algún día
cuando los ojos clausuren el paso de la luz
no lloverá jamás.