Murió descalza en el verde prado
la acariciaba el alba, con su tenue luz
murió descalza en el verde prado
soñando una esperanza, que no pudo hallar
Niña del hambre, que pronto te has ido
quisiera devolverte un soplo de vida
decir que el mundo no es tanto ni malo
vuela feliz, en un soplo de aire
Quizá conozcas un mundo que sea mejor
donde la envidia, no venza al destino
y el corazón sea humano, no en frío de piedra
niña del hambre, hoy muero contigo
Eras una llama al viento, que el viento apagó
tu lecho era vigilia, tu destino el hambre
desde pequeña te enseñaron a morir sin haber vivido
vagando por rincones, con sed de muchas aguas
Por esas sombras huecas, de niños que han muerto
por esos pies descalzos, que no pueden cubrir
por aquellos sin mañana, borrada la sonrisa
que clamando un mendrugo, lloran por la injusticia
Niña de la calle, nacida del viento
hoy con mi pluma quisiera ayudarte
reclamar la justicia, a esos seres sin alma
que sabiendo todo, lo toman con calma