No culpes a la gente por decepcionarte,
acepta que es tu culpa por esperar demasiado de ellos.
Anónimo.
Es lo que más asesina el alma en un ser humano.
Cuando es de un amigo duele en la confianza.
Cuando es de un hermano mata la fe.
Cuando es de la misma vida ya no vivirás más.
Porque mata el creer más que la decepción.