Dejemos que pase el tiempo,
dejemos que mueran los recuerdos,
dejemos que se desvanezcan nuestros besos,
dejemos que el amor huya,
así como nosotros huimos del fuego,
pero en la tormenta buscamos pasión,
dejemos que todo fluya,
si te recuerdo en mis sueños
te abrasaré, si te pienso
no te dejaré partir, quiero
que seas como el mar,
tranquilizante en verano y
en invierno quiero que seas
el desastre que atormente
mi alma, porque tal vez
en mi mente vivirás eternamente.