Si me preguntan que es el Amor, les diría las poquitas letras de tu nombre, y describiría la mirada de anhelo que pones cuando me miras .
Si me preguntan que es Perfección, les diría que es tu cuerpo sobre mi cama, que es tu piel caliente como el sol y que es suave y misteriosa como la luna.
Si me preguntan que es la Paz, diría que son tus ojitos cerrados mientras duermes y el murmullo de tu boca que humedece mis labios, o tu cabello descansando en mi almohada.
Si me preguntan que es Suavidad,
trataría de explicarla con el roce de tus manos, con el menú de besos perfectos que tienden a derribarme, o con tus intensas caricias que derriten.
Si me preguntan que es Libertad, les diría que somos tu y yo cuando estamos juntos y que volamos como aves hasta tocar el cielo y comernos el alma.
Si me preguntaran que es Pasión, hablaría de nuestras noches, de los cuentos que inventamos cuando todos duermen, o de las cositas que hacemos hasta quedar postrados.
Si me preguntan que es el Silencio,
diría que son los gritos desesperados de este loco diciendo “Te Amo”,
o de tu manera única de entregarme todo sin decir una sola palabra.
Si me preguntan que es Dulzura, les hablaría de tus palabras, de tus risas, de tus bromas que me intimidan, de los berrinches que hacés y los “complots” que provocas.
Si me preguntan que es Magia,
hablaría de tus trucos, tus encantos, tus fantasías, de la locura de este acto que no se detiene, de la fuerza de este idilio que nos arde por dentro.
Se me preguntan que es AMOR,
les diría que es tu nombre grabado sobre mi alma, que es mi manera loca de pensarte, de querer tenerte,
que sos mi sangre hirviendo, sos mi corazón latiendo, que sos mil poesías y un millón de estribillos.
C.