A través de la inmóvil noche
Entes metálicos, ciego, obtusos
Estaciones de difícil comprensión
Sin temor a desaparecer
Adentrándose o mejor dicho
Dejándose a la noche, y su entrar
O natural arremeter del incierto
Infinito alrededor, única realidad
Calles como cuerdas de funimbulista
Mantenidos al margen, creemos; no
Caer en el vacío que sostiene las cosas
Separadas de su abismo interior, esta noche
Espesa, incómoda como un martes negro
Cualquiera, cualquier es, uno alejado de sí
En sarcófagos portando sueños que se per-
Petúan jurándolos tácitamente no cumplir
O rigurosos gusanos, del averno al averno
Entes innombrables, ciudades del olvido
Preocupaciones del momento, lo mejor
Es bajarse si uno ya ha llegado ¿A dónde venía uno?
Agosto, 8.12 am