Atí hombre que adornas un jardín
con alegría y con delicadeza,
retirás cada flor que llega a su fin
guardando sus semillas en una fortaleza.
Rosas rojas son las que plantaís
en espacios distanciados,
rosas de colores son las que llevaís
en canastillos adornados.
Vamos vamos viejo jardinero
no te canses de sembrar,
que siempre serás el primero
con bellas flores vas a deslumbrar.
Ya pronto se a de venir
el sol primaveral,
para dejar atrás
la temerosa lluvia invernal.
No hay cosa mas bello y lindo
que encontrarse con un hermoso jardín,
en medio un gran guindo
que nos regalara caras bonitas y un lindo reír.
Hermosas son las flores
que adornan nuestro hogar,
dichoso el jardinero
que no se cansa de sembrar.
Bendito este humilde jardinero
que Dios hermosas manos le regalo
bendecid sus flores primero
porque la dulzura de tus besos me las llevo yo.