Así como quien no puede más,
y con su último aliento, aprovecha
para susurrar las últimas palabras de su vida:
Quisiera haber vivido más;
Quisiera haber sentido más;
Quisiera no haberte dicho que te marches; que te quedaras,
que formemos una familia,
que me hagas padre y que yo
pudiera haberte hecho madre.
Quisiera haber podido entender esto antes:
Que quiero quererte para que me quieras como yo quiera querer.