¿Qué es el amor?
una simple pregunta
que te llena de dudas
cuando tratas de dar su definición.
¿Qué es exactamente?
Si todos lo hemos sentido,
pero nunca hemos tenido
el interés por saber qué sucede.
Es una dulce agonía,
una sinfonía agobiante,
un dolor insoportable
que, a la vez, de él sobrevivirías.
Es un soneto descompuesto,
una caricia vacía,
unas lágrimas de alegría,
un control sobre tus sueños.
Un recuerdo del futuro,
una paradoja con sentido,
una lluvia seca del destino
que ocurre en todo el mundo.
Amanecer sin la aparición del sol,
anochecer sin luna,
mar sin su espuma,
es un juego para dos.
Suaves y ásperas caricias,
dulces cantos en silencio,
juego alegre que te da tormento,
momento inesperado que ansías.
Y sin saber por qué, aceptas,
acabas tu vida al empezarla,
es tuya al entregarla,
nada es tuyo aunque lo tengas.
Un claro color oscuro,
un cielo bajo,
un poco que es tanto,
todos a la vez que ninguno.
Algo extraño que es tan común,
algo sombrío lleno de luz,
ese “él” se vuelve “tú”,
es la única enfermedad en la salud.
Veneno mortal que se cura,
segundos que duran años,
justicia en un juego errado,
duda que es segura.
Un ayer sin un mañana,
un hoy sin un presente,
una presencia que está ausente,
una espera que no aguarda.
Este es el amor, ésta es su definición,
es algo sin sentido,
que a su vez siempre lo ha tenido.
Es un juego para dos.