Flancale

\\\\\\\'Lo mismo\\\\\\\'

Las mismas manos y el mismo huerto;

la misma risa y el mismo tiempo.

 

La misma casa. De los asaltos y lamentos;

con la misma entrada y un par de asientos.

 

Por donde huyen como las olas

los más osados sentimientos.

 

Que somos mucho,

o somos poco.

 

Todo y cuanto soñamos,

todo y cuanto queremos.

 

Y el hombre nunca despierta,

del tan profundo deseo.

 

Hasta que pierde las manos,

hasta que abandona el huerto.

 

Hasta que olvida la risa,

hasta que se le acaba el tiempo.