Advierto tu espíritu en la desnudez de la noche
Incógnito, misterioso, como un fantasma de mí mismo
Contemplo tu rostro en las sombras, como huellas en el agua
Sustancial, enigmático, como visión incomprensible de un futuro etéreo
Esperaré por ti, por tu materia
Esencial, sublime, en la maravilla de tu indiferencia
Esperaré por ti, por tu desamor
Sereno, imperturbable, en la aventura de tu reposo y armonía
Quién conocerá de su futuro
Quién sonreirá en tu encuentro
Quién, sin cesar en su pensamiento, imaginará su traslucido destino
Entretanto en mi debate dudo en reverenciarlo todo, o no amar nada
Tu al final de tu hosca jornada, extiendes portentosas tus alas
Sin sonreír siquiera, entre nieblas y el destino
Aún preparas el camino que llevará tu nombre y apellido
Alma, interior y mis entrañas
Aunque todo lo sepamos del destino
No me abandones, sostén mi espíritu peregrino
Fortalece mi voz, grita conmigo, Ven a mí, Verdad y Vida
Ven a mi o muerte, parca y furtiva