Y es que soy muy pequeño a tu lado
por eso Tu Humildad me hace grande
pero que feliz soy de que te acuerdes de mi
Tu en el Universo entero no cabes
yo soy la punta de un alfiler
pero tienes mi amor, Tu bien lo sabes
me consuelas, me guías, me perdonas
y me llevas en tu regazo, y si caigo
Tu me levantas, y secas mi lágrimas
y ya no me acuerdo de ese porrazo
¿ Quién soy yo, para que me tengas en cuenta ?
una motíta de polvo en la solapa
de esta vieja chaqueta de pana, remendada
un puntíto negro, en el blanco de una libreta
un barquito pequeño, en el inmenso mar de la vida
a la deriva, si Tu no me guías
de Tu mano quiero caminar como un niño
eres la Luz, el Camino, la Esperanza
el Cielo Azul, la Brillante mañana
el agua fresca para mi sedienta alma
eres mi Refugio, cambias mi cama
cuando estoy enfermo, me llamas
si alguna vez me pierdo, y me arropas
como la gallina a sus polluélos, bajo sus alas
Tu eres el faro que brilla en la distancia
tengo hambre de fé entre mis manos
lleno estoy de agradecimiento,
a veces me duele la palabra
para decirte lo que siento
me quema tu nombre, hasta el aliento
espérame en el camino, que voy contigo
ya se ve el Paraíso en la distancia
acuérdate de mí, quiero ser tu amigo
para toda la Eternidad, soy tu cautivo
en mi corazón soy tan pequeñito
pero tu Humildad, al acordarte de mi
tu Humildad me hace grande...
Soy la oveja perdida, en tu regazo
siempre, siempre quiero estar...
y decir con orgullo ¡ Soy Testigo de Jehová...!