Se acorta el dia.
Nubes tristes amontona la distancia.
Llegó el viento frío y aullador.
El sol se apagó en mi corazón.
La ráfaga húmeda y violenta
arrebata las hojas a los árboles,
hiende las ramas y destroza nidos.
Mi margarita se deshoja con dolor.
Retumba el trueno y por un instante
el brillo cegador de una centella
ioniza el aire con su luz de nervios.
Estalla mi cerebro y galopa el corazón.
Las gotas se unen en la tarde
lava el ambiente y vienen los torrentes
cargados de detritus y temor.
Y lloran mis entrañas.
Cesó la tempestad.-Aire es aroma.
La arboleda se ve recién nacida
y en la tarde, el barrio estrena aceras.
Sigo con mi dolor.