Podrás creer que el cielo se tornará rojo,
Pero nunca creas que te engañaría.
Puedes creer que la vida es una suerte,
Pero no creas que pienso en alguien más.
Porque mi corazón late por ti,
Mis manos solo desean tocarte,
Mis labios se derriten por un beso tuyo,
Y mis pensamientos están llenos de ti.
Y si eso no fuera suficiente,
Créeme, amor mío,
Que en mí no hay lugar
Para nadie más.
Porque el corazón es uno,
Y una la que está en él.
Eres tú, amada mía.
A quien le doy la vida.
Y aunque fuera el final de nosotros,
Sabría qué a pesar de todo,
Te fui fiel hasta la muerte,
Porque estar sin ti, eso amor, es morir.