Cuando la Naturaleza se pone a llorar,
mi corazón tras la ventana se pone a mirar,
el sonido continuo del grito me hace vagar
y la melancolía me invade y no me deja respirar.
Al cielo con mis lágrimas hace un río,
¿por qué la Tristeza me invade en este regadío?
El velo gris se llena de soledad y de frío,
que me inunda sin remedio en mi pobre navío.
Camino desnudo y el campo que me devore,
mis pasos sin hollar y la gota que lo decore
dejo a la lluvia vestir mi cuerpo que lo adore,
ya soy uno con ella y muerto mi alma aflore.
Ahora que soy Alma de Dios, yo soy el que lloro,
ahora seré yo quien bese tu cuerpo de oro,
y te llevaré conmigo como si fueras mi tesoro,
tristes y juntos caeremos en tierra como un meteoro.
22 DE OCTUBRE DEL 2.014
NACHO REY