Letras que desean volar por el cielo cuando la magia de su virtud se dió en estos grandes poetas de la humanidad, para ellos... mil reverencias…
A la Mar
Las mañanas son largas como el tiempo inerte,
es la mar que lleva una soledad,
Allá en el horizonte queda una mirada,
que dice -“allá está la mar”-.
¡Dos olas toscas y recias en medio de la mar,
nos toca el dolor de ser un náufrago sin destino!.
¿Gritas?... porque nadie escucha tu dolor,
allí, después del ocaso lánguido y queda la noche.
Homenaje a Antonio Machado “Campo”...
El Náufrago
Entre todo un mar abierto,
nada mi cuerpo entre las olas perdidas,
y nado y nado, y la ola me sigue,
cuando miro: no hay nada.
Cuando me enfrento a la ola que me lleva,
no hay nada,
sólo el mar se mueve,
como olas impetuosas y de corrientes altas,
que enredan mi cuerpo,
nado y nado, y nada me sigue,
donde sólo yo soy el náufrago,
y por delante de mí hay otro náufrago,
que me dice -“no hay nada”-.
Homenaje a Octavio Paz “La Calle”...
Pues, un Pecado
Sin herir qué pensar, pues, un pecado,
y sin defraudar con inmensa herida,
pues, pequé en el corazón y en la vida.
Desafíe por ser amamantado.
Y más, la vida no me dió más fuerza,
y de un espíritu sin ser capaz,
lloré mil veces, lo que fue ser tenaz,
porque pequé lo que hoy la vida lanza.
Fallecí. Y despojo mil ataduras,
y las que a mayor obsesión dejé.
Y rompí yo, vilmente y con torturas.
De un impío corazón que defraudé,
y cuando en la mañana fui aventuras,
de un olvido funesto y yo, pequé…
Homenaje a Jorge Luis Borges “El Remordimiento”...