En una tarde asoleada, tranquilo y feliz, mirando
El paisaje me siento vivir, disfrutando del silencio
Y de mi propia compañía de entre mis labios se
Escapa una sonrisa.
En una tarde asoleada vi pasar a la vecina, una
Joven muy bonita, solo mirarla me alegra el día,
Sentí una brisa fresca recorrer mi cabeza, miré al
Cielo a las nubes viajeras que no se detenían,
Respiré y me dije ay que dicha.