Verano Brisas

LA PALABRA EXACTA

Quien no se expresa con claridad,

utilizando en cada momento la palabra exacta,

corre el peligro de ser mal interpretado.

 

No pienses que soy vulgar.

¿Cómo podría serlo contigo?

Pero si empleo otra palabra

la petición que te hago pierde fuerza

y no alcanza a expresarte mi deseo.

 

Quiero besarte. Poner mi lengua allá

donde eres más cálida y acogedora.

Aunque no es exactamente allá

sino un poco más atrás,

donde guardas oferente, como un cáliz,

el primoroso anillito de tu culo.