Beatriz Blanca

PARTIENDO

La vida, cuando se va escurriendo, hiere

emanando vacíos sin consuelos 

al arrancar las huellas de mis duelos

porque, estancarme es solo lo que quiere

 

Se siente en el delirio que infiere

cuando me arranca del pecho los cielos

para consumir el aire con sus hielos

ahogando las fuerzas que tuviere.

 

Me deseas rendida en el olvido

para que solitaria quede inerte.

¡Ya está echada mi desgraciada suerte!

 

sabes que la batalla la he perdido

pues, no he logrado poder encenderte

sabiéndome anhelada por la muerte,