Finalmente mi vida, creo que podemos ser,como en copos de azucar, como navegar en aguas dulces, te veo sonreír y puedo escuchar tu risa sonando para siempre, te puedo contar que le confío a la luna las noches que nos quedan de eternos en esta vida morontial,te confieso que puedo amarte para siempre,que puedo poner mi mano sobre tu piel y sentir como quiebra el aire cada arruga aparienciendo, en tus ojos se conjuga nuestra eternidad,y finalmente un dia la muerte nos encuentre agarrados de la mano, caminando quizás como dos jovenes enamorados por las peatonalesmas bellas de nuestra Córdoba querida, ciudad que fue testigo del vaivén de nuestras sábanas, de nuestra pasion y de nuestro amor a primera vista.
Puedo decirte que quiero acompañarte, estar en las buenas y en las malas a pesar de no creer en esos contratos, creo en el alma, en el espiritu y todo aquello que es mas que piel y huesos, porque mas que amarte amo tu esencia y deseo acompañarla el resto de mis dias.