Vive el día de hoy. Captúralo.
No te fíes del incierto mañana.
Horacio
Ojalá todos los hombres y mujeres
se consumieran en el fuego del deseo,
en la chispa nocturna de la concupiscencia.
De todos los placeres mundanos
el erotismo debe servirse en copa de oro.
No importa su carácter o sus giros:
Puede darse de la puta al santo.
Del genio a la mujer sencilla.
De la cortesana a su rey.
Del rey a la princesa lejana.
¿Por qué no de hombre a hombre?
¿Por qué no de una mujer a otra?
El viejo prefiere a la joven por su frescura.
El niño goza con la experiencia de la mujer adulta.
Satisface ya tu deseo porque la vida es corta
y no habrá nueva oportunidad.
Una vez que el tiempo pasa, no regresa nunca.