Enero de 1996 ella estrenando sus 20 primaveras, él estrenando sus 21, parecia un dia cualquiera un dia mas de trabajo, un dia soleado con mucho calor como eran esos días en esa gran ciudad; nadie sospechaba tal vez ni ellos lo intuian pero ese día cambiaron dos caminos porque con el atardecer se tuvieron que juntar, ella vestía un lindo traje, blusa color rosado falda blanca y unas lindas sandalias, él su ropa normal, acordaron encontrarse para conversar y tuvieron que llegar hasta El Rosal asi se llamaba aquel lugar.
Tal vez un poco tímidos e impacientes ,él le pedía una oportunidad, ella al final dijo que si, así poco a poco se acercaron, él preguntó....te puedo dar un beso....y aquellos labios de color rosa terminaron por ceder, sus ojos vieron como el color rosa de sus labios se corría por sus mejías, sentados bajo un árbol y echados en la hierba aquella historia se escribía.