Emmy Gutier

Mi silencio es un voto sagrado que no se rompe

Y esperaré sumisa

que termines y selles tus reclamos,

mi silencio es un voto sagrado que no se rompe,

 las gotas cristalinas de mis ojos

son el sello de tristeza que los marca,

jámas tuve la intención de lastimarte

pero en mi afán de tener a todos contentos

maldije sus vidas con mi presencia.

Me trague mi orgullo como siempre

suplicando la gracia de tus ojos

mientras tanto

mi alma desgraciada ya había firmado su sentencia perpetua.

 

 

Silencio guardo el cielo

y las estrellas se vistieron con la brisa de luto,

al darse cuenta que la delicada flor de pétalos transparentes

se marchito sin remedio a media noche.

Su cuerpecito estaba solo y frío ,

su triste alma que sola se sintió,

dijo a adiós y nadie la escucho.

Al fin que quien admiraría a una flor marchita

por mas hermosa que allá sido cuando se vestía de la vida.