A MI DULCE DEBILIDAD
Qué suaves son tus palabras
sonidos que soñaron los ángeles
sueños que ilusionaron
a los buscadores de tesoros,
mares que surcaron los navegantes
miradas cómo espejos relucientes,
secretos de los amores a dos voces
qué suaves son los sentimientos
qué brotan de tu boca.
No es extraño lo suave,
sí todo lo qué proviene de tí,
es siempre , suave.
ARGON