(Redondillas octosílabas)
Calló el llanero canalla
en el llano de la yuca,
y la lluvia en la batalla
acalló el yugo en su nuca.
El yugo fiero y engallo
que allá allende de la mar
lo hizo lacayo y vasallo
de una saya y una llar
que toda llaga le sella
y ayuda cual lazarillo,
pues es su llama y estrella
la chiquilla de ese anillo.
Su dulce y bella doncella
que ya no lo va a arrullar,
la metralla le hizo mella
y al llanero hizo callar.
Murió el criollo llanero
en el llano y con su puyo,
y la bella al caballero
lo llora con sumo orgullo.