(I)
El alba...
apenas se nos muestra,
impura...
se encela de cristales,
poesía vertida
de postales...
en la hornacina
inadecuada
de sus días,
no es su labio...
la boca del desierto,
en lagos...
se muestra primorosa,
en éter desnudo
de su risa...
confunde la noche
con sus horas.
(II)
Cristalina aurora...
se encela de armonía,
plegada...
se hiere desnutrida,
preñada...
de lánguido secreto,
confunde...
la noche con el día,
carbón...
ardiente se consume,
en pálida...
cometa deslucida,
ligada...
entre lánguidos clamores,
confunde...
su boca con la mía.