Cuando a tu corazón viene la nada
cuando la nada es lo único que queda
de aquel que compartió tus anhelos
sientes el vértigo de la desolación
y te excita la muerte al otro lado de la felicidad,
y persigues la salida más breve
cesando tu aire en el agua
pero el aire no cesa
pero la vida no cesa
porque aún no es la hora de tu alma.