Y si te dijera exactamente lo que siento, estaría mintiendo deliberadamente. Porque en realidad dista de ser exacto, es sencillamente mágico. Quién pudiera describirlo o acaso resolverlo.
Un fuego frío, un cerro llano, un puñal luminoso, un albaricoque desalmibarado, un dolor dulce, un sol helado.
Que me hace feliz, y no. Que me llena de pena, y no...
La tristeza de la lejanía. La negación del futuro probable. La ceguera voluntaria. La leve osadía. El cariño inocultable.
Aparecés en cualquier cosa y de repente. Culpable de sonrisas tontas de las que no sos testigo. Y sin saberlo bien del todo, siempre hacés mis días más cerca de sentido.
Me rindo por lo que siento, porque evitarlo no puedo. Y tu palabra me encanta. Pero me faltan tus besos.