VIAJE A NINGUNA PARTE
¡Vorágine de tráfico!
Voy perdido, circulo haciendo eses,
me lleva alguna mano,
me engulle el despropósito,
el golpe improvisado
sin rumbo, ¡voy perdido!
Parezco más un pollo perdida la cabeza.
Estrépito y el caos, bocinas y cláxones
invaden el asfalto.
La vida atropellada, ¿quién ordenarla puede?
sin norte ni horizonte. ¡Señales!,
más señales hacia ninguna parte
y giros, ¿en este embrollo?
¿a izquierda, a la derecha…?
¡Ay si ascender pudiera!,
sobrevolar ¿con qué alas?
para escapar con bien de tanto disparate
y ver desde lo alto el tránsito atascado.
¡Stop!, parece ser que debo
detenerme en este instante,
¡si yo quiero seguir! Me pisan los talones,
me invaden y me asaltan, me empujan,
me envisten y me atropellan.
Si miro para arriba, el cielo encapotado,
con una boina negra de humo,
muy bien aderezado.
Si miro al negro suelo,
de asfalto negro y sucio,
sucio de polución,
ganas me dan, lo juro,
de darme media vuelta
o de salir corriendo,
quién sabe para dónde.
¡Qué pánico, qué caos,
hoy vuelvo a llegar tarde!
Ahora estoy convencido,
al fin lo tengo claro:
¡mi próximo viaje,
lo haré intergaláctico
para llegar sin prisas
donde no espere nadie!
Gonzaleja