Buena amiga soledad, tan puntual como siempre en las arenas del tiempo
arraigada en el alma, presente aun, en las diminutas pautas de un agitado corazón
que desesperado lame, la miel prohibida de besos fugitivos.
Sabes tanto de todos, buena amiga soledad,
por lo que siempre regresas con la manos floridas de recuerdos
escondidos todos, bajo la piel contentiva de pasiones y dolores
Curtida de tiempo, de caricias tantas,
de abrazos cuantos, de algún modo, amadas todas
e impregnadas de ti, con rasgos de silencio
Buena amiga soledad, cuéntame del furor de las palabras escondidas
inmersas en cada emoción, aquellas que nunca se dijeron
y que fueron tan evidente como tu presencia
entre tanta muchedumbre
Describe ese lugar, buena amiga soledad,
donde el viento se devuelve
con un vendaval de te quiero enraizado en las entrañas
porque la impía sobriedad inhibe al alma expresar lo que siente.
Siéntate a mi lado, buena amiga soledad
hoy, tan solo quiero contigo, mirar el ocaso.
Askier, San Sebastián de los Reyes, 23-09-2018