\"Tu cuerpo desnudo me perturba,
pero sólo imaginarlo me duele; y me
duele aquí, con lo que te pienso,
donde el deseo es tal que tensiona
mis músculos y la sangre corre por tí.
Pensarte me enloquece y me calma;
tengo hambre de ti y sólo tú me sacias.
Quiero besar tus labios, esos que
guardan silencio, que no saben
hablar y que aún sin hacerlo, llaman mi nombre\"
Marco Antonio Saborío Parreaguirre.