Me gustaría saber si al anochecer,
Cuando las horas ya no importan
Y es la luna la que, gentil, te acuna,
En algún momento me puedes ver.
En ese instante que la presencia
De lo que habita en tu mente
Está formado de pura esencia
Y el personaje ya no te miente.
Allí es donde espero aparecer
entre recuerdos felices arraigados
y sonrisas que no pierden la fé,
soñando, sin límites, a tu lado.