argantonio

El azul de la infancia

¿ Por qué llevan ropa azul esos hombres

que corren por las calles del pueblo

pegando tiros?

 

Ya se sentía pintor de tierras

y cielos, el niño visionario quería

desentrañar el universo, con sus

elipses, sus espirales infinitas,

superficies lunares llenas de olivares,

alma de la geometría en movimiento,

creaba poliedros que parecían obra

de precoz ingenio, rostros trabajados

con raíces en la tierra, en la tierra que

habitamos, jardines que son benditos

oasis que en el corazón llevamos.

 

Pero Diego aquel niño de ochenta años

tan buen discípulo del otro gran Diego,

se nos está yendo, cuando tiene

algún momento de lucidez

le dice a su leal compañera,¨Estoy cansado

de estar muerto¨. Allí está inmóvil, postrado

consolado por su mujer y sus últimos cuadros

y poliédros.