Alguna vez un desgastado rayo de luna
En algún lugar del tiempo perdido
La vida fundió nuestras tristes almas
En cálido e inolvidable romance
Desde entonces no hubo sombra
Que nublará nuestras vidas
Caminamos asidos a la esperanza
Abrazados al naciente amor
Unimos nuestros labios, nuestras vidas
Fundimos nuestras ansiedades y
Llenamos de aromas nuestras inquietudes
Bebimos del mismo vaso el néctar de la pasión
Un día volteaste la página de tu vida
Y otros labios borraron los míos
La esquina de nuestros encuentros
Es hoy el testigo de mis llantos.
Yo sé que hoy vives la aparente felicidad
Como a los viejos y cansados álamos
No voltearás para mirarme
Y yo con el alma desgarrada te veré pasar
Por esas cosas tan absurdas de la vida
Por esos misterios que nunca entenderás
Siempre podrás contar conmigo
Al fin y al cabo sólo yo fui quien te amó
Te acogeré como un verdadero amigo
Te ofreceré mis cansadas manos
Como el viejo y olvidado roble
Siempre te daré mi sombra
No importa donde estés ni con quien
Siempre estaré esperando tu regreso
Y si un día eres realmente feliz
Imitando al ocaso del solitario sol
Me hundiré en las sombras del olvido
Lima 1 de octubre del 2018