Vuela alto hacia las alturas
Y deja caer un poco de ti
Suavemente
Que a su encuentro voy.
Deja rozar tu piel dormida
Con el céfiro
Que sequen tus lágrimas
Y que el dolor diluya
Amablemente.
Despierta en los altos pinos
Ante un cielo azul luminoso
Y en tu paz
De mí no te olvides.