Alma atormentada

Gaditana, pienso en ti (Rima CXIV)

Como puedes ver

era la alegría de la huerta,

te debí defender

del simple,

pues hubo reyerta,

aquel individuo y yo

te dejamos boquiabierta,

con el cansancio te hice

una mala oferta,

tú actuaste

de manera experta,

fui yo el que no te dije

que mi mente no estaba

despierta,

y actué

de manera inexperta,

por dejarte triste

y no atravesar tu puerta,

mi alma en vida

esta muerta,

solo saber que eres feliz,

puede que lo revierta;

aquel elemento y yo,

no evolucionamos, y

nos debimos quedar

en Atapuerca.