Santiago Esquivel

Crónica de una lágrima nocturna.

Crónica de una lágrima nocturna.

 

Nace y cae lentamente

Desde aquel lagrimal vibrante.

 

Rasguña silenciosamente las mejillas

Dejando átomos humedecidos detrás de sus pasos.

 

Caera, finalmente y suavemente sobre la almohada,

Acomodando la tumba para las que vienen detras de ella.