(I)
DE ORO Y GRANA
Libad del vino
su ambrosía...
que Dionisos apague
el fuego desnutrido,
que Afrodita muestre
el pecho generoso...
musitado en el cáliz,
desasosegado
de un latido,
el sol alza su oro
de armonía...
entre nubes
se desgasta la mañana,
es el beso
la saeta de Cupido...
desgarrado en el labio
de su amada.
(II)
EN SUS MURALLAS...
Mi princesa...
En las murallas del castillo,
Peinaba sus cabellos
Ante la rosa...
Indescifrable del destino,
Y un extravagante
Sabor a incienso...
Volaba tenue en las paredes,
Entre perales y prados verdes
Heridos de silencio...
Y preclaro orgullo,
Brumosa luz...
Y desgastada ausencia,
En las níveas soledades del olvido.