Querido apareciste un día en mi vida. No esperaba conocerte y cuando te vi sentí que en la maceta de mi alma brotaba la flor más hermosa que podría imaginarme y ahora me falta tu amor, llevo meses y meses sin saber nada de ti.
No hay destino más cruel para el amor que ser asesinado por el tiempo. Que el paso de los días lo ahogue hasta dejarlo sin alas y sin sueños. Que la escoba del olvido borre nuestras imágenes y que la flor del amor muera seca por falta de riego.
Querido, te amo y estaría dispuesta a tirarme desde el más alto escalón de mis sueños para poder alcanzarte y que renazca nuestro amor.