Patricia Aznar Laffont

MI PUERTA ESTÁ HOY ENTREABIERTA...

Aquella mágica

canción de  Arcángeles,

Tiempo o Pretérito era.

Atardeceres y ocasos subyugantes

Y Eternos.

En la letanía borrosa de tus rasgos

que ya no recuerdo..

Miraba, ayer lo hondo en la nieve

de tu Ausencia impiadosa.

Te sabía

de memoria, Amor Contrariado..

El sol era explosión de la certeza del

Ser, en tus huellas.

Huellas que hierven en tu presencia ya extinguida.

Huellas que escuchan la próxima noche,

 estampada en  audaces y negras nubes

y herméticas como el Destino incognoscible

que nos aguarda sin dádivas ni prisa.

 

Veo los gorriones de esta Primavera

resguardarse en aquel abedul

color de cielo,

 sus ramas quebradas aún

 y de espuma doradas y crujientes sus hojas.

 

Y entro a la Vida…

 

Quisiera que este canto distante

que anida glorioso hoy en mi alma,

reviva  horas y lenguas muerta

que eche puñados de tierra fértil,

en mis amores,

mientras ,

mi corazón sobrevuela  los cielos.

 

Y que el brillo hechizado

 de tus ojos sin color

sea el fulgor cercano de  tu recuerdo en alegría.

Alegría, que hoy golpea,  ladina y atrevida

mi puerta…

no ya cerrada

con viejos y gastados goznes…

 

Mi Puerta está apenas,

 hoy,

 entreabierta.