Los finos rayos de sol,
van dorando las corolas,
de las rojas azaleas,
que con sutileza brotan,
embelleciendo el jardín,
en donde también se asoman,
los coloridos geranios,
con los verdes en sus hojas,
colgando de las paredes,
embellecidas con frondas,
es bucólico el ambiente,
donde el dinero no importa.
Es maravilloso el paso
inquieto de mariposas,
que liban el néctar dulce,
que de las corolas brota,
y se marchan diligentes,
hacia la planta más próxima,
donde buscan los pistilos,
con el polen que transportan,
es un acto natural,
una acción maravillosa.
Todo inspira en derredor,
es colorida la flora,
son muestras de sencillez,
y un ejemplo de concordia,
no es claro para los hombres,
que a los valores sonrojan,
mostrando su estupidez,
cuando la razón desploman.
Son cosas simples y pronto
sin pensar, al alma afloran,
no existen los maquillajes,
que la vanidad controla,
ni la traicionera envidia,
que toda amistad abolla,
es simple naturaleza,
de Dios, su mejor rapsodia,
la que con mucha miopía,
el ser humano no explora,
porque a las cosas, se aferra,
y al espíritu trastorna.
El ser en su corazón,
tiene la bruñida joya,
que es el amor solidario,
¡Con él!, marcará la historia.