Me da vergüenza ajena lo que ganan algunas personas,
Que trabajan poco o nada en las empresas,
con coches como limusinas,
y su único anhelo es... aumentar sus arcas.
Me dan vergüenza ajena los jóvenes,
Que no ceden su sitio a las embarazadas,
a los discapacitados, o los mayores,
algunas veces te cede el sitió quien menos debe.
Me da mucha vergüenza ajena las personas sujetas a corruptelas,
luego critican a los políticos,
pero la corrupción empieza en esas triquiñuelas,
donde se intenta robar a pequeña escala en las sombras.
Me da vergüenza ajena las personas que ante un defecto físico o psíquico permanente,
no saben o no pueden evitar herir la sensibilidad,
hay muchas formas de evitar abrir la herida saliente,
sin hurgar en problemas sin solución temporal con enorme frialdad.
Por último, me da vergüenza ajena, los que miran por encima a los demás,
o que ni siquiera te miran, te ignoran,
por una supuesta inferioridad de origen económica o laboral,
son ciegos impenitentes de sus propias miserias.