Me consume cada noche
Y cada madrugada
Las preguntas llenas de dudas
Y el cielo con la luna menguante
Es repugnante la tos
Debido a su constancia
Los pulmones hacen notar su cansancio
Y en esencia se añora descanso
Sin pesadillas y sin sueños
Solo insomnio y desvelo
Cuanto puedes pensar antes de dormir
Cuanto puedes dormir para volver a pensar
Entre soledad y silencio
El despertar grita y obliga
La rutina castiga con fatiga
Y el ocio conlleva un gran precio
Finge que no lo oyes
Pero sabes que te escucha
El problema no es lo que has visto
El problema es que lo sentiste
Persiste el olor en el recuerdo
Pero mi pasado aun así se hace lejano
mientras que mi futuro se estrecha
y el espejo grita en vano
verdades que no quiero aceptar.