Patricia Aznar Laffont

NACIENDO DE LA NADA

Fueron meses disolviéndome
en la Nada,
reencarnada mi alma,
en seres disímiles y siniestros,
pero igual seguí 
amando 
a tus ojos vacíos y sin Luz,
que ahogaban recuerdos y 
el Presente.

Oye, escucha!
esta música
de mi Renacimiento!

Oye, esta voz suave y altiva
que brota de mi pluma,
desde el más fogoso
Interior de mi alma,
casi aniquilada
por Ayeres sucios y amarillentos
de Tiempo transcurrido indolente,
sin cesar ,
y sin piadosos sentimientos.

Pero, aún sigo viva!

Envíame aquella dulce sonrisa
que había perdido, 
borrada
de mis gestos,
por horrores padecidos,
encolumnados de Muerte
y blanco mármol.

Búscame !
y  me encontrarás jamás Vencida!

Asesino
de mis  lluvias, amaneceres y vientos!