“Estar Enamorada”
No fueron nuestras mañana
Ni tampoco nuestras noches
Las que nos hallaron juntos
No fue el sol del mediodía
Ni la luna de madruga
Solo fueron tardes noches
Desplegadas sobre alas blancas
Una voz a media noche
Con pulcra monotonía
Una voz en la distancia etérea
Una sonrisa tras portones
Algún bar de pasada
Alguna ventana del saber
Una tenue mirada tras pizarras
Algún recinto en el que te resguardabas
Y fue la luna y fue la magia
El sol y la pasión desmesurada
El té, el café y todas nuestras charlas