I
Es centrar nuestros sentidos
En lo puro real y divino
Porque creerle a Dios
Es el acto sublime
De declarar lo imposible
A pesar de las circunstancias
Es tener la paz y la confianza
La fe y la perseverancia
En aquel que con su majestad
Creo todo el universo
Distinguiendo la noche del día
Porque su luz bendita
Es la prueba genuina
De su poderosa existencia
II
Como no creer en Dios
Si él fue el que te escogió
Desde el vientre materno
Y te mostró lo excelso
Lo real y lo perfecto
Que estar bajo su abrigo
Porque él ha estado contigo
Cuando tus fuerzas han menguado
En los momentos difíciles
Tus lágrimas él ha secado
Porque su amor puro y sagrado
Es el elixir celestial
Único, excelso e ideal
Que transformar lo invisible
En el milagroso más hermoso
III
Como no creer en Dios
Si él para ti creo
Los paisajes más hermosos
Que existen en el planeta
Y con su excelsa sapiencia
Lleno de preciosos matices
Todo lo oscuro y lo triste
Que había a su alrededor
Creando la hermosa flor
Que crece en la pradera
Y aquella ave cantarina
Que con su preciosa melodía
Le rinde honor y pleitesía
A su creador y su dueño
Porque su poder es invencible
IV
¡Creerle a Dios¡
Es tocar el cielo con las manos
Es centrar todo lo que has anhelado
En la majestad que tiene tu creador
Y través de la oración
Debes evocar lo divino
Dejando en el olvido
Los problemas que aquejan tu vida
Porque Dios hará maravillas
Si aprendes a creer en el
Y pronto veras resplandecer
En ti el precioso milagro
Que el con sus manos ha creado
Para que el mundo sea testigo
De su prodigioso poder
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
12/10/2.018.
09:53 A.M